Cómo delegar y no morir en el intento:
parte II
¿Cómo delegar ?
Primero, piensa qué tareas te gustaría delegar. Una vez las tengas establecidas, tienes que identificar a las personas que son más adecuadas para asumir esas nuevas responsabilidades.
Para ello, es evidente que la persona más idónea será la más capacitada, pero cuidado con sobrecargar a los más eficientes y/o descuidar el crecimiento del resto de miembros del equipo. Si focalizas todas las tareas en una misma persona, nadie más aprenderá y nadie debería ser imprescindible.
Una vez hayas decidido qué tareas delegar y a quién encomendárselas, ten en cuenta estos tips para empezar a hacerlo con éxito:
- Empieza cuanto antes, no esperes a “tener tiempo”. En cuanto surja la tarea delégala y establece un plazo razonable para su realización, para poder reclamarla en el tiempo que hayas indicado (no en el último momento o cuando tu creas que debería estar hecho): pasa del control a la supervisión.
- Planifica y anticípate a las necesidades.
- Proporciona toda la información y los medios disponibles, la autoridad necesaria y el tiempo razonable para su cumplimiento.
- No dudes en formar o mentorizar al nuevo responsable, asegurándote de usar un estilo de comunicación efectivo, donde no haya lugar a las interpretaciones.
- Revisa periódicamente aquello que delegas. Delegar no es olvidarse y reclamar cuando lo necesites, monitoriza los avances dando espacio a la persona y sin perder conocimiento.
- No olvides dar siempre feedback a la persona una vez completada la tarea y reconoce los éxitos.
Nota: Sabemos que sobre el papel es más fácil que llevarlo a cabo, y es que delegar no es nada fácil. Pero quizás, con esta técnica te resulte más sencillo.
Técnica para empezar a
delegar en tres pasos.
PASO 1: Elabora un listado de las tareas que realizas a lo largo de la semana e indica el tiempo que dedicas a cada una de ellas. Obtendrás un mapa que te dirá a qué estás dedicando tu tiempo en una semana de trabajo.
PASO 2: Selecciona entre todas las tareas cuáles de ellas son delegables y que además sumen en total el 25% de tu tiempo de trabajo. Una vez identificadas comienza a delegar hoy mismo esas tareas, siguiendo los tips que se detallan más arriba.
PASO 3: Analiza y establece a qué vas a dedicar ese 25% del tiempo liberado. Céntrate en acciones propias de un líder, aquéllas que posibilitan que lo importante se lleve a cabo: estrategia, planificación, creación, toma de decisiones… o incluso a tener más tiempo libre.